¿Qué es una auditoría energética? ¿Cuándo es obligatoria?
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Cada vez son más los casos de facturas energéticas con un gasto excesivo. Una solución para reducir el consumo a lo mínimo posible, por supuesto sin afectar a la producción de la empresa o al confort del hogar, es mediante una auditoría energética.
Una auditoría energética es el estudio de los flujos de energía de un edificio, ya sea industrial o residencial, con el fin de reducir el consumo y conseguir un ahorro energético y económico. Debe ser realizada por un auditor energético cualificado.
Con dicho estudio se realiza un análisis y diagnóstico de la situación actual y trata de mejorar la eficiencia energética de la edificación, encontrando oportunidades para reducir la cantidad de energía consumida.
Cumpliendo con las recomendaciones sugeridas en una auditoria energética, se puede ahorrar un 25% o más de consumo energético anual.
¿Cuando debe hacerse una auditoría energética?
Si tu inmueble tiene un alto consumo energético, entonces te interesa llevar a cabo una auditoria energética del mismo.
Es especialmente recomendable en comunidades de vecinos y empresas, ya que suelen consumir bastante más energía que en una vivienda o pequeño negocio.
¿Qué se analiza en una auditoría energética?
Normalmente se siguen los siguientes pasos en una auditoría energética:
- Planificación y recopilación de información
- Realización de mediciones
- Revisión y análisis de los datos
- Diagnóstico de la situación
- Formulación de propuestas de mejoras
- Elaboración del informe final de auditoria
Y, entre los datos que se analizan conviene destacar:
- El consumo energético, a través de las facturas y de los datos del contador.
- La energía reactiva que no se aprovecha para el consumo, analizando la red eléctrica.
- El aislamiento, la envolvente, los cerramientos, los puentes térmicos; cualquier escenario que esté provocando pérdidas de energía.
- La iluminación, la potencia que consumen y que esta sea la óptima.
- La climatización, la renovación del aire y el agua caliente sanitaria y los equipos, para comprobar que el rendimiento sea el óptimo.
- Los sistemas de monitorización y control, si existen, se comprueba que funcionan del modo adecuado.
¿Qué oportunidades de mejoras puede detectar?
Algunas de las mejoras que pueden ser detectadas en una auditoría energética son, entre otras:
- Reducción de la potencia contratada en el suministro
- Revisión de los contratos
- Cambios en la tarifa de luz
- Integración de instalaciones fotovoltaicas
- Sustitución del alumbrado por unos más eficientes
Ventajas de una auditoría energética
Una auditoría energética, más que un gasto, es una inversión con beneficios a corto plazo perdurables en el tiempo. Las ventajas principales que presenta son:
- Ahorro energético
- Ahorro económico
- Contribución al cuidado del medio ambiente
- Aumento de la competitividad de la empresa
- Mejora de la imagen empresarial
- Incremento de la posibilidad de encontrar inversores
¿Es obligatorio realizar una auditoría energética?
Desde noviembre del año 2016 es obligatorio que todas las grandes empresas realicen una auditoría energética cada 4 años, únicamente si cumplen alguna de las siguientes características:
- Más de 250 trabajadores
- Más de 50 millones de euros de volumen de negocio y más de 43 millones de balance general
También deben llevarla a cabo grupos de sociedades definidos en el artículo 42 del código de comercio y centros de trabajo temporal, empresas públicas, universidades u otras con fines no lucrativos que cumplan alguna de las características citadas. Quedan excluidas las microempresas y PYMES.
No obstante, para el resto de negocios también es conveniente realizarla por las ventajas que supone a corto y largo plazo.
